COSAS CURIOSAS DEL PENE
En este nueva entrada de nuestro blog de CAM4, queremos hablaros de un ente que puede ser considerado el amigo de todos y todas. Sí, el pene, el pito. Ese órgano que, como dice el humorista Agustín Jiménez, “va a su propia bola, es un colega más”.
Vamos a comentar algunas cosillas curiosas y fenómenos acerca de la tranca:
1. Podemos encontrarnos el Nabo Evidente vs. el Rabo Sorpresa.
El miembro Evidente es aquél pene curiosote de serie, que al llegar la erección no sufre una metamorfosis, si no que se mantiene en el mismo estilo de tamaño y grosor.
La chorra sorpresa, por contra, es aquella algo más discretita, que cuando llega el momento clave te da la alegría.
Pero no os flipéis, no hay un cipote mejor que otro… y en la práctica hay 1001 clasificaciones más.
2. El fenómeno de la picha nocturna. Distintos estudios muestran cómo la verga puede venirse arriba una media de 11 veces por el día y 9 por la noche. No es que tengas ganas de mear… si no que el propio cuerpo arranca motores de vez en cuando para mantener apunto la máquina que llevas dentro. Es la “tumescencia peneal nocturna”, que a veces acaba en “polución nocturna”, ya sabes (chof! en medio de la noche)… Mucha marcha nocturna, como veis.
3. La minga en números:
El falo puede eyacular entre 1 y 5 mililitros, (de una a dos cucharaditas de café). Ten en cuenta que cada cucharadita son 7 calorías. El trabuco dispara a 18km/h, asique cuidado con los ojitos porque puede llegar a los 90 cm de distancia si vas con ganas (aunque el record mundial está en 6 metros… si lo superas, ¡avisa a las autoridades!).
Además, ten en cuenta que el soldadito se puede venir arriba, pasando de 0 a 100 en menos de 10 segundos; y la duración máxima en firme que se ha registrado es de 180 minutos (sin pastillita azul).
4. ¡Ojo! La erección de la chorra puede perder hasta 1cm por una razón… ¡¡el tabaco!! El tabaco puede afectar al riego sanguíneo. ¡Vida sana!
Si sabes más curiosidades compártelas con CAM4
Y como decía un famoso cantautor, el miembro viril tiene nombres mil. Llámalo como quieras, pero cuídalo
